La gente no usa plata. Los smartphones reemplazaron a los billetes, DNIs, tarjetas de transporte, y, desde que los viejos usan whatsapp, los cuartos oscuros tampoco existen.
Es que el problema de Argentina no era el peronismo. Era el fanatismo.
No está bien en claro por qué, pero resultó que la intransigencia de obligar a la gente a votar era lo que sostenía al statu quo. Si no eras de este equipo entonces eras del otro. Y todo mal con vos. Ó algo así razonaban las masas.
Las salas de eco construidas por los arquitectos de las 36 cuotas sin interés ahora tienen un grafitti en su pared que dice “Si vas a tener la razón, entonces mejor hacela valer”. Y es que el valor es algo que nos concierne a todos. Por eso es que ahora reina el consenso (de los que se burlan de los tiranos).
Los indignados se fueron. Estos asesinos vergonzosos se esconden de manera igualitaria detrás de sus diversas pantallas. Y lo pueden hacer gracias a que un gobierno previo acabó con el narcotráfico de smartphones. Tu DNI, tu IMEI. Tu celular. Así como apareció la caja de ahorro universal y gratuita, también nació el preservativo con forma de smartphone: ahora quienes chorean un teléfono lo hacen porque quieren sentir placer anal —se los meten en el orto.
En medio de una feroz batalla entre mercado pago y los bancos, un sistema de pagos interbancarios te permite transferir dinero instantáneamente necesitando sólo del código QR del acreedor y la huella digital ó PIN de quien desea realizar el pago. El sistema, que ahora también se utiliza dentro de la red de transporte metropolitana, permite al gobierno administrar la tarifa social según el sector demográfico del pasajero.
Como los sistemas de reconocimiento de malvivientes utilizan las cámaras urbanas desplegadas en trenes y colectivos, el partido intransigente de la izquierda impone su fibrosa y viril intolerancia prohibiendo que los sistemas operen con normalidad bajo la figura judicial de non afferentem ad faciem (no a la portación de cara). Los violadores se pueden mover tranquilamente en la sociedad, pero a la izquierda no le importa ya que rebosa de felicidad tras ganar la votación en un centro de estudiantes que lucha contra la imposición del pensamiento totalitario.
Es que reconociendo la ilimitada capacidad creativa de los Argentinos, el gobierno le solicita a los artistas, que a través de su arte, compitan proponiendo soluciones que faciliten la exportación de sus creaciones. Dinero que será utilizado para solventar el presupuesto destinado a las ciencias blandas.
Fiel a su lema “No Somos Un País de Mierda”, Daniel Schteingart realiza estudios que derivan en la desgravación impositiva total de los servicios que desarrollan soluciones tecnológicas encargadas en agregarle valor a la industria del campo1, la minería, la pesca, y el reciclado de residuos.
Argentina penetra en el mercado internacional de soluciones agrícolas y, de manera pionera, se ocupa de su pueblo al prohibir el JMAF como reemplazo de azúcar en sus productos alimenticios.
La triple frontera es un canal de youtube que la gente mira cuando está aburrida. Drones que la sobrevuelan con cámaras de alta resolución (y visión nocturna), cargan sus baterías en cualquiera de las bases militarizadas de combate dronístico: simples torres recubiertas de paneles solares cuyo acceso físico es restringido, y que también están monitoreadas públicamente.
Todo esto se dio porque la gente utiliza las redes sociales para compartir y votar contenido bufonezco. La libertad es enemiga de lo políticamente correcto.
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